Innovación es riesgo y necesita disponer de espacios y entornos abiertos a la exploración y el aprendizaje, donde la confianza sea el clima dominante. Es clave contar con convicción, flexibilidad, ilusión, tenacidad y valentía para lograrlo.

En este sentido, la empresa Square, anteriormente conocida como Block, corrió riesgos al lanzar un pequeño lector de tarjetas cuadrado para facilitar pagos con tarjetas de crédito a artistas y vendedores.

Aprovecharon la creciente ola de los teléfonos inteligentes y los pagos en línea, y a lo largo de los años, evolucionaron y ampliaron su negocio, centrando su atención en soluciones para pequeñas empresas, incluidos préstamos y nóminas.

Además, se aventuraron en el mundo de las criptomonedas, ofreciendo comercio de bitcoins y proyectos criptográficos. Su enfoque en la experimentación y la perseverancia les permitió superar obstáculos, y su mentalidad innovadora los llevó a convertirse en una potencia financiera de más de $50 mil millones.